Ada Lovelace, la primera programadora de la historia

5
(8)

La historia de las mujeres creativas en cualquier faceta del conocimiento, del arte, . . . de la inteligencia y la sensibilidad en sus vertiginosos horizontes, es una historia de ocultamientos, de menoscabos, de silencios y prejuicios aún en nuestros tiempos.

María Cristina Solaeche (1994) 

En una entrada anterior, hablamos de Hedy Lamarr, la increíble mente detrás del wifi. Pero ella no es la única mujer cuyo legado en la ciencia ha sido pasado por alto. Hay muchas más, cuyos inventos y contribuciones han tardado en ser reconocidos, algunas incluso mucho después de su tiempo. En esta ocasión hablaremos de otra mujer muy significativa en el mundo de la tecnología: Ada Lovelace.

Ada Lovelace

Ada Augusta Byron King condesa de Lovelace (1815-1852), más conocida como Ada Lovelace, vivió casi 100 años antes del nacimiento de Hedy Lamarr. En ese tiempo era más difícil el estudio para las mujeres, pero Ada tuvo el privilegio de tener muchas oportunidades debido a sus padres, el poeta Lord Byron y Anabella Milbanke, y de un título de la realeza por parte de su esposo que le ayudó a ser conocida en la época.

Ada se dedicaba a una amplia gama de actividades, como la música, la danza, la equitación y la astronomía, pero encontró su verdadera pasión en la escritura y las matemáticas. Tuvo la suerte de estar rodeada de mujeres destacadas, como su madre, quien la introdujo en el fascinante mundo de la mecánica. Otra figura influyente para ella fue Mary Somerville, una astrónoma matemática y divulgadora científica, quien la ayudó a conocer a Charles Babbage, el “padre de los ordenadores” y creador de la máquina analítica. Gracias a estas conexiones, Ada encontró un mentor y amigo en Babbage, sentando las bases para su contribución excepcional en el campo de la computación.

Aquel invento de Babbage, la máquina analítica, era capaz de calcular expresiones polinómicas, extraer raíces de ecuaciones cuadráticas y contar hasta 10,000. Trabajaba de la siguiente manera: a través de dígitos decimales (0-9), en lugar de cantidades; estos dígitos se representaban por posiciones en ruedas engranaje en lugar de dígitos binarios (como los bits). Cuando una de estas ruedas giraba de nuevo al cero hacía que la siguiente avanzara a la otra posición llevando a un dígito y además de eso tenía un almacenamiento temporal de la información, esta máquina tenía un funcionamiento similar a los procesadores que existen en la actualidad.

Mientras muchos simplemente veían la máquina como un nuevo invento, Ada, una joven visionaria, reconoció su potencial y fue más allá de su funcionalidad. Después de colaborar con Babbage, como tutor, le pidió a Ada que tradujera un artículo sobre su trabajo. Sin embargo, no se limitó a eso, sino que también aportó su propia idea al respecto. Comprendiendo a la perfección el trabajo de Babbage, afirmó que la máquina no solo podía realizar cálculos numéricos, sino que también podía programarse para seguir una secuencia de instrucciones. Esta innovación permitiría que la máquina funcionara con otros elementos, similar al telar de seda de Joseph-Marie Jacquard, capaz de crear imágenes automáticamente mediante una cadena de tarjetas perforadas. Ada tejía patrones algebraicos utilizando una secuencia de números de Bernoulli. Su destacado trabajo fue firmado con sus iniciales, A.A.L.

“Podemos decir con mayor precisión que el motor analítico teje patrones algebraicos al igual que el telar Jacquard teje flores y hojas.”

Ada Lovelace

El artículo de Ada fue reconocido por muy pocos en su época a pesar de su claridad. Pasaron casi dos siglos para que se pusiera en práctica, pero la idea de Ada aún era comprendida. Podría considerarse un trabajo adelantado a su época, creado por una joven visionaria que creía en la imaginación, la creatividad y la búsqueda de nuevos conocimientos e ideas. Este artículo se menciona como una práctica de datos, tarjetas, memoria y programación y, aunque la mayoría de sus trabajos está presentado al estudio de matemáticas, éste hizo posible el comienzo de la informática y de la programación.

Sin embargo, Ada y Babbage tuvieron diversos desacuerdos y dejaron de colaborar directamente, pero siguieron siendo amigos y mantenían contacto a través de cartas en las que compartían detalles de sus vidas. Trágicamente, Ada Lovelace falleció a una edad temprana, a los 36 años. Años después de su muerte, en 1979, el gobierno de los Estados Unidos creó el lenguaje de programación ADA en honor a Ada Byron Lovelace. Este lenguaje de programación extenso se diseñó especialmente para aplicaciones militares, brindando una forma más práctica y eficiente de programar. El nombre MIL-STD-1815 se le otorgó en referencia al año de nacimiento de Ada.

Además, en reconocimiento a sus importantes contribuciones, el segundo martes de octubre se celebra el Día de Ada Lovelace, una fecha en la que se honra a las mujeres que han dejado su huella en los campos de la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. En este día se destacan y se valoran los logros de las mujeres en estas áreas. Asimismo, existe el prestigioso premio llamado Ada Augusta Lovelace otorgado por la Asociación de Mujeres en Computación (AWC, por sus siglas en inglés), y que reconoce a las mujeres profesionales que han realizado destacadas contribuciones en el campo de la informática y la tecnología. Además del premio Ada Augusta Lovelace, existen otros galardones que se otorgan en su honor, reconociendo así su legado y su impacto en el mundo de la ciencia y la tecnología.

A pesar de las controversias que rodearon su vida personal y sus estudios, no hay duda de que Ada fue un ejemplo de genialidad e inteligencia. Gracias a su visión y comprensión más allá de aquel invento, se han generado numerosos avances y desarrollos en la actualidad, incluyendo lenguajes de programación. Ada Lovelace es reconocida como la Primera programadora de la historia, dejando un legado invaluable.

Es importante reflexionar sobre los privilegios que Ada pudo disfrutar debido a su estatus social; sin embargo, esto nos lleva a preguntarnos cuántas mujeres asombrosas no tuvieron las mismas oportunidades en el pasado. Estoy segura de que existen muchas historias por descubrir y personas destacadas que merecen reconocimiento. A medida que pasen los años, esperamos que se encuentre más información sobre ellas. Mientras tanto, es fundamental dar voz a aquellas mujeres que aún no son ampliamente conocidas y resaltar sus logros en el campo de la ciencia y la tecnología.

Quizás en el pasado no me emocionaba mucho por aprender sobre la historia de las mujeres y su papel en la ciencia, pero ahora sé lo importante que es conocerlas. En su época, muchas de ellas enfrentaron enormes desafíos para mostrar, enseñar y hablar sobre su trabajo. Conocer sus historias nos brinda inspiración y modelos a seguir, nos ayuda a reconocer las contribuciones que han sido ignoradas y nos permite desafiar los estereotipos de género en el campo científico; asimismo, nos impulsa a trabajar hacia la igualdad de oportunidades y a promover un entorno inclusivo en la ciencia. Conocer su legado, nos permite apreciar el valor y la importancia de las mujeres en la ciencia a lo largo de la historia.

Podemos agradecer a través de nuestro privilegio de conocer, escribir, leer y estudiar, pero no nos olvidemos que aún en la actualidad hay ciertas situaciones o lugares donde no se valora el trabajo de mujeres e incluso hay mujeres que no tienen la oportunidad de estudiar una carrera o iniciar sus estudios primarios.

¿Cómo crees que se podría ayudar a mujeres en este tipo de situación? ¿Conocías a Ada Lovelace ? 

La imaginación es la facultad del descubrimiento, prominentemente. Es lo que penetra en los mundos nunca vistos a nuestro alrededor, los mundos de la ciencia.”

Ada Lovelace

¿Quieres saber más?

Ada Lovelace, Biografía de mujeres destacadas

Ada Lovelace The computer programmer who had ideas long before there were computers

Hammerman, R. & Russell, A. L. (2015), “Ada’s Legacy: Cultures of Computing from the Victorian to the Digital Age“, ACM Books, p. 243.

Ada Lovelace, the First Tech Visionary

Solaeche Galera, M. C. (1994). “Lady Ada Byron y el primer programa para computadoras”“, Divulgaciones Matemáticas, 2 (1): 75–81.

Charles Babbage

¿Te ha gustado este artículo?

¡Haz clic en una estrella para puntuar!

Promedio de puntuación 5 / 5. Recuento de votos: 8

Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este artículo.

Ya que has encontrado útil este artículo...

¡Compártelo con tus amigues!

Siento que este artículo no te haya gustado...

¡Déjame mejorar este artículo!

Dime, ¿Cómo puedo mejorar este artículo?

Autor

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio
Ir al contenido